Hemos descubierto de casualidad este producto: el Kitchen Safe.
Kitchen Safe es una caja robusta y transparente que cuenta con un cierre de seguridad programable. Gracias a este cierre de seguridad podremos acceder al contenido allí guardado una vez termine la cuenta atrás.
Cuenta con una pantalla en la zona superior en la que se puede ver el tiempo restante para abrirse y un mecanismo de seguridad que funciona con un pequeño motor.
¿Y cuál es el tiempo máximo de programación? Pues desde un solo minuto hasta 10 días. Las baterías duran entre 6 y 12 meses y, aunque nos quedemos sin ellas, la caja seguirá cerrada dejándonos cambiar de pilas sin necesidad de abrirla.
Un producto desde luego novedoso que está basado, según sus propios fabricantes, en que incluso las personas con un gran éxito son incapaces de controlar la fuerza de voluntad en todas las situaciones. En cambio, estas personas si son capaces de utilizar el precompromiso, autoimponiéndose límites que, en teoría, facilitarán su día a día.
Con el sistema que proponen desde Kitchen Safe elegimos privarnos de algo a lo que nos cuesta renunciar tomando la decisión una sola vez. Además, el verte privado de ese bien hará que, casi de manera inconsciente, empieces a buscar un bien sustitutivo que a largo plazo elimine esa necesidad de nuestras vidas.
Por supuesto que el sistema tiene sus carencias, pero haber sido lanzado desde una plataforma de crowfunding nos lleva a pensar que tiene un mercado importante. Entre las carencias o dudas que se nos plantean están:
- ¿Tener esa tentación a la vista y no poder cogerla no aumentará mi ansiedad por ese producto?
- ¿Qué tipo de producto guardaré ahí para que no pueda volver a comprarlo? Por ejemplo, puedo guardar una cajetilla de tabaco hasta dentro de 10 días pero… ¿no iré corriendo a por otra en cuanto salga de casa?
- ¿Tiene el tamaño adecuado para guardar todas mis tentaciones?
En este momento podéis estar pensando que es mucho más sencillo no comprar un determinado producto para no tener la tentación cerca o simplemente creéis mucho en vuestro propio autocontrol. Nos encontramos en el mismo caso que en los productos de ahorro, planes de pensiones, etc… si todos fuéramos capaces de controlarnos en todo momento no necesitaríamos este tipo de servicios.
Los creadores están muy satisfechos con el éxito conseguido y a nosotros se nos ocurren un montón de ejemplos que podríamos guardar en ella:
- Dulces
- Snacks
- El móvil
- Juguetes
- Tabaco
- Cámaras
- Llaves del coche, moto…
- Tarjetas de crédito
- Fármacos
y en general todos aquellas cosas que nos generan cierta dependencia.
¿Qué os parece el invento? ¿Os gustaría tener una Kitchen Safe en casa? ¿Qué es lo primero que guardaríais? Si estáis interesados en comprarlo, podéis hacerlo aquí.
Deja una respuesta